Me gustan mucho las manzanas. Creo que es bastante evidente cuando me pongo a mirar mis publicaciones, ya que un gran número de estas son de recetas que incluyen este tipo de fruta.
Durante esta semana y la próxima voy a estar muy liada y casi no tendré tiempo para nada, así que hace unos días estuve buscando recetas rápidas, ricas y bonitas.
Este bizcocho de manzana con cáscara es genial porque se mantiene húmedo y jugoso mucho tiempo, tiene un toque de canela espectacular, es rapidísimo de preparar y resulta muy original al aprovechar incluso la piel de las manzanas. La receta la he obtenido de la web de Pamela Brandao, podéis verla aquí. Yo no soy demasiado buena para los idiomas, pero es bastante fácil de entender… y con un poquito de ayuda del diccionario ha sido pan comido.
Durante esta semana y la próxima voy a estar muy liada y casi no tendré tiempo para nada, así que hace unos días estuve buscando recetas rápidas, ricas y bonitas.
Este bizcocho de manzana con cáscara es genial porque se mantiene húmedo y jugoso mucho tiempo, tiene un toque de canela espectacular, es rapidísimo de preparar y resulta muy original al aprovechar incluso la piel de las manzanas. La receta la he obtenido de la web de Pamela Brandao, podéis verla aquí. Yo no soy demasiado buena para los idiomas, pero es bastante fácil de entender… y con un poquito de ayuda del diccionario ha sido pan comido.
Bizcocho de Manzana con cáscara (Bolo de Maçã com Casca)
Ingredientes:
- 2 tazas de harina
- 1 y 1/2 tazas de azúcar
- 3 huevos
- 1 cucharada de canela (yo sólo usé ½ cucharada)
- 1 pizca de sal
- 3 manzanas (yo he utilizado 2 manzanas medianas)
- 1 taza de aceite vegetal (yo usé aceite de girasol)
- 1 cucharadita de levadura
Elaboración:
En primer lugar precalentamos el horno a 180ºC y engrasamos y enharinamos el molde. Yo he utilizado un molde redondo de 25 cm de diámetro, pero en la receta original se utiliza un molde rectangular de 23x35cm.
Luego, lavamos y pelamos las manzanas y reservamos las cáscaras. Troceamos las manzanas en dados de aproximadamente 1,5 cm de grosor. Esto dependerá del gusto de cada uno y de si preferimos que la fruta quede más o menos cocida o si queremos que se note más o menos la fruta al comer el bizcocho. Reservamos la fruta troceada.
Ahora, en un recipiente grande ponemos la piel de las manzanas y añadimos los huevos, la sal, el aceite y el azúcar. Con ayuda de la batidora lo batimos todo muy bien hasta que la cascara de manzana esté totalmente triturada e integrada con el resto de ingredientes.
Incorporamos los ingredientes secos (harina, canela y levadura) en dos o tres veces. Podemos seguir utilizando la batidora, aunque cuando esté toda la harina resultará un poco más difícil de batir, ya que la mezcla resultante es bastante espesa.
Sólo nos falta añadir los trozos de manzana a la mezcla y remover con ayuda de una espátula de silicona. Vertemos la mezcla en el molde y la extendemos en el molde con ayuda de la espátula. (En realidad este paso no sería necesario ya que con el calor del horno la mezcla se acabaría extendiendo por sí sola, pero recordad que se trata de una mezcla bastante espesa con trozos de fruta y no queremos que los trocitos estén mal repartidos)
Horneamos durante 40-50 minutos a 180ºC con la opción “calor abajo”. Yo he puesto el molde en la bandeja inferior, pero mi horno es de 45cm de alto, así que para hornos grandes tal vez sea mejor a una altura media-baja.
Tendremos listo nuestro bizcocho cuando al pinchar con un palillo éste salga limpio. Lo dejamos enfriar sobre una rejilla.
Podemos decorarlo con azúcar granulado y un poco de canela, aunque yo lo he espolvoreado con un poquito de azúcar glas.
Espero que os haya gustado y que os animéis a prepáralo.
Luego, lavamos y pelamos las manzanas y reservamos las cáscaras. Troceamos las manzanas en dados de aproximadamente 1,5 cm de grosor. Esto dependerá del gusto de cada uno y de si preferimos que la fruta quede más o menos cocida o si queremos que se note más o menos la fruta al comer el bizcocho. Reservamos la fruta troceada.
Ahora, en un recipiente grande ponemos la piel de las manzanas y añadimos los huevos, la sal, el aceite y el azúcar. Con ayuda de la batidora lo batimos todo muy bien hasta que la cascara de manzana esté totalmente triturada e integrada con el resto de ingredientes.
Incorporamos los ingredientes secos (harina, canela y levadura) en dos o tres veces. Podemos seguir utilizando la batidora, aunque cuando esté toda la harina resultará un poco más difícil de batir, ya que la mezcla resultante es bastante espesa.
Sólo nos falta añadir los trozos de manzana a la mezcla y remover con ayuda de una espátula de silicona. Vertemos la mezcla en el molde y la extendemos en el molde con ayuda de la espátula. (En realidad este paso no sería necesario ya que con el calor del horno la mezcla se acabaría extendiendo por sí sola, pero recordad que se trata de una mezcla bastante espesa con trozos de fruta y no queremos que los trocitos estén mal repartidos)
Horneamos durante 40-50 minutos a 180ºC con la opción “calor abajo”. Yo he puesto el molde en la bandeja inferior, pero mi horno es de 45cm de alto, así que para hornos grandes tal vez sea mejor a una altura media-baja.
Tendremos listo nuestro bizcocho cuando al pinchar con un palillo éste salga limpio. Lo dejamos enfriar sobre una rejilla.
Podemos decorarlo con azúcar granulado y un poco de canela, aunque yo lo he espolvoreado con un poquito de azúcar glas.
Espero que os haya gustado y que os animéis a prepáralo.
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