Hoy traigo una receta cortita pero muy sana y muy rica: galletas de avena. Ya sabéis que soy una pesada de la avena y que me encanta, así que buscando un poco he encontrado una receta ideal para hacer en apenas media hora y tener lista una merienda estupenda.
La receta la he encontrado en el blog Cocinando entre Olivos (podéis verla aquí). El blog me ha parecido una monada, tanto en la estética y diseño del mismo blog como en la variedad de recetas que hay. Que de cosas me quedan aún por cocinar…
Bueno, no me entretengo, ya os digo que es una receta rapidísima y además le podéis incorporar frutos secos o incluso fruta. A la receta básica yo le he añadido almendras laminadas y media manzana y han quedado geniales.
La receta la he encontrado en el blog Cocinando entre Olivos (podéis verla aquí). El blog me ha parecido una monada, tanto en la estética y diseño del mismo blog como en la variedad de recetas que hay. Que de cosas me quedan aún por cocinar…
Bueno, no me entretengo, ya os digo que es una receta rapidísima y además le podéis incorporar frutos secos o incluso fruta. A la receta básica yo le he añadido almendras laminadas y media manzana y han quedado geniales.
Galletas de avena
Ingredientes:
- 230 gr de copos de avena
- 100 gr de harina
- 1/2 cta de levadura química
- 150 gr de azúcar moreno
- 1 pizca de sal
- 2 huevos
- 150 ml de aceite de oliva virgen extra
- 1 cta de esencia de vainilla (opcional)
- 1/2 manzana troceada (opcional)
- 2-3 cdas de almendras laminadas o picadas (opcional)
- 2-3 onzas de chocolate negro (para decorar) (opcional)
Preparación:
En un cuenco pesamos los ingredientes secos (avena, harina, levadura, azúcar moreno y la sal). Removemos un poco todos los ingredientes con una cuchara.
Por otra parte, en un bol grande batimos los huevos muy bien con el aceite y la esencia de vainilla. Cuanto estén bien batidos incorporamos los ingredientes secos. Una vez obtenida una mezcla homogénea y un poco pegajosa ya podemos preparar nuestras galletas.
Yo he añadido un poco de almendras y manzana. La almendra le da un toque crujiente y la manzana aporta un poco de jugosidad muy rico. En caso de incorporar estos ingredientes no es más que trocearlos pequeños, añadirlos a la mezcla y remover hasta tener nuevamente todos los ingredientes integrados.
Ahora, sobre una bandeja forrada con papel vegetal vamos colocando cucharadas de la mezcla. No es necesario darle una forma redonda perfecta, pero si queréis podéis hacer una bolita con las manos y la aplastáis un poco. Yo hice 12 galletas y el resto de la mezcla lo extendí sobre papel vegetal y procurando darle una forma rectangular de 1 centímetro de espesor aproximadamente. La idea era trocear después del horneado esta “supergalleta” y así obtener pequeñas porciones como si se tratase de unos brownies.
Las galletas las horneamos a 180ºC durante 10-12 minutos o hasta que veamos que se ponen doraditas. Luego las dejamos enfriar sobre una rejilla.
Para darles un toque de color las he decorado con un poquito de chocolate, derritiendo un par de onzas de chocolate negro y dejando caer hilos sobre la superficie de las galletas.
Creo que el efecto es bastante bonito y quedan unas galletas muy vistosas.
Por otra parte, en un bol grande batimos los huevos muy bien con el aceite y la esencia de vainilla. Cuanto estén bien batidos incorporamos los ingredientes secos. Una vez obtenida una mezcla homogénea y un poco pegajosa ya podemos preparar nuestras galletas.
Yo he añadido un poco de almendras y manzana. La almendra le da un toque crujiente y la manzana aporta un poco de jugosidad muy rico. En caso de incorporar estos ingredientes no es más que trocearlos pequeños, añadirlos a la mezcla y remover hasta tener nuevamente todos los ingredientes integrados.
Ahora, sobre una bandeja forrada con papel vegetal vamos colocando cucharadas de la mezcla. No es necesario darle una forma redonda perfecta, pero si queréis podéis hacer una bolita con las manos y la aplastáis un poco. Yo hice 12 galletas y el resto de la mezcla lo extendí sobre papel vegetal y procurando darle una forma rectangular de 1 centímetro de espesor aproximadamente. La idea era trocear después del horneado esta “supergalleta” y así obtener pequeñas porciones como si se tratase de unos brownies.
Las galletas las horneamos a 180ºC durante 10-12 minutos o hasta que veamos que se ponen doraditas. Luego las dejamos enfriar sobre una rejilla.
Para darles un toque de color las he decorado con un poquito de chocolate, derritiendo un par de onzas de chocolate negro y dejando caer hilos sobre la superficie de las galletas.
Creo que el efecto es bastante bonito y quedan unas galletas muy vistosas.
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